El actual nivel del río Paraná y sus principales afluentes genera las condiciones para que una práctica tan perjudicial para la preservación del recurso ictícola como la pesca indiscriminada continúe siendo frecuente en la región. En este contexto, durante la madrugada el viernes, Gendarmería Nacional secuestró más de 200 kilos de pescados que iban dentro de un camión con destino a Posadas, Misiones. Dentro de la mercadería encontraron ejemplares de las especies más comunes en el Paraná: 38 especímenes de surubí, 70 dorados y 20 patíes.
Según las primeras investigaciones, el vehículo habría partido desde la localidad correntina de Berón de Astrada. Las agentes de la fuerza nacional estimaron que la carga estaba valuada en $1.100.000 aproximadamente.