La empresa damnificada, M.C., -con sede en Orlando, Florida- fue representada por el Dr. Diego Sebastián Gutiérrez, un jóven profesional quien actualmente se desempeña como presidente del Colegio de Abogados de Resistencia y presidente de la Federación de Colegios de Abogados del Chaco, quien imparte-además- enseñanza del Derecho e Internet en la UTN, facultad regional Resistencia.

De la referida causa surge que si bien la condena menciona 500 monedas virtuales, habrían sido mas de 619 las sustraídas en la operación que dio lugar a la investigación.

También se supo que el abogados de la querella Dr. Diego Gutiérrez, pudo aportar a la causa un equipo de peritos especializados que viajaron desde Orlando -Florida- que pudieron demostrar a ciencia cierta, los accesos remotos por via de una VPN, (Virtual Private Network) que enmascaró el IP (Internet Protocol), pero generaron los datos necesarios para que la acusación contara con los elementos de juicio necesario, que finalmente terminaron por forzarel acuerdo del imputado con el fiscal por juicio abreviado, que significó dos años de prisión efectiva para el condenado.

A ello se suma que la querella aportó las filmaciones de un sistema de seguridad privado de nombre Lucky Orange, que permitieron dejar filmados los movimientos de los hackers.

Se pudo allí acreditar que el imputado tuvo acceso a la plataforma de intrercambio de monedas (trading) de la empresa, mediante diversos perfiles, y distintas direcciones IP (Reino Unido, Suiza, Argentina). Pero analizando los movimientos recurrentes -y con las mismas técnicas-por medio del referido sistema de seguridad, se pudo geolocalizar la IP de Argentina, y gracias a la participación en conjunto de fuerzas de seguridad internacionales y de la fiscalía Nº 13, a cargo del Dr. Lucio Otero, y de la División Tecnológica de la Policía del Chaco, se pudieron secuestrar diversos elementos.

Además, entre los elementos secuestrados, luego de peritados se habría encontrado algun chat de una conocida red social, en el cual el imputado (hoy condenado) mantuvo comunicación respecto de la sustracción de critpomonedas.

Es por ello que habiendo -el entonces imputado- aceptado la comisión del delito de defraudación informática en concurso real con violación de secretos y de la privacidad (acceso ilegítimo a un sistema informático) que permitió la condena, asumen valor crítico tanto el actuar de las fuerzas de seguridad internacional, como las locales, así como la actuación de la querella que permitieron dar adecuado cumplimiento de la justicia.

En fin, todo se resume en una cuestión de envases nuevos y contenidos viejos- Envases viejos con contenidos nuevos? Lo cierto es que el delito, aunque sea informático, sigue siendo efectuado por personas físicas, que en algún momento, comenten algún error.