Peppo remarcó que como Estado todavía “tenemos mucho para hacer, hay genocidas vivos entre nosotros sin justicia, madres sin hijos y abuelas sin nietos”. En ese sentido, reafirmó de manera contundente la prioridad del Estado de defender los Derechos Humanos y la disposición de herramientas a la Justicia para agilizar los procesos que devuelvan la identidad a cerca de 160 desaparecidos chaqueños.

“Desde la Secretaría de Derechos Humanos, el Estado actúa como querellante en todos los casos poniéndonos a disposición, trabajando para encontrar a nuestros queridos desaparecidos chaqueños”, aseguró. También mencionó que se alzará un monumento para recordar a estos desaparecidos de la provincia.

En esa misma línea destacó el reciente convenio firmado con Abuelas de Plaza de Mayo para trabajar en conjunto en las políticas de derechos humanos: “Es un orgullo para nosotros decir que Chaco reivindica a Abuelas en el planteo de que la Verdad y la Justicia son principios democráticos y que los derechos humanos son fundamentales”, precisó.

Peppo remarcó el reconocimiento a los militantes desaparecidos y valoró a los jóvenes y a las organizaciones sociales que se comprometen con una causa: “Quiero valorar ese espíritu joven de buscar el cambio, de un país igualitario para todos”, dijo.

Finalmente, manifestó el compromiso del Estado de continuar trabajando de manera constante en la defensa de los Derechos Humanos, con la constitución y los principios de la Convención Interamericana de Derechos Humanos. “Para que esa sangre derramada no sea en vano, tenemos ese compromiso por la verdad y la justicia para siempre”, concluyó.

Estuvieron presentes además, el intendente de Resistencia Jorge Capitanich, el secretario de Derechos Humanos Juan Carlos Goya, el secretario General de Gobierno Horacio Rey, el ministro de Educación Daniel Farías, el presidente del Instituto de Cultura Héctor Bernabé, legisladores y militantes de organismos de Derechos Humanos.

Patrimonio de todos los argentinos

El intendente de Resistencia dio un repaso sobre los objetivos de fondo que tuvo el golpe cívico militar que inició el 24 de marzo del 1976: “El plan siniestro de la dictara militar más genocida tuvo una estrategia de carácter político y económico, en donde se persiguieron dirigentes políticos, sociales”, expresó. Aseguró que esta parte de la historia “requiere una reparación desde el punto de vista judicial, a los efectos de condenar a los culpables de los crímenes de lesa humanidad que han enlutado a nuestro pueblo argentino”.

En tanto, instó a mantener la lucha universal: “La memoria, la verdad y la justicia no puede ser modificada por un decreto presidencial para pasar un fin de semana. Este día debe ser patrimonio de todos los argentinos, independientemente de la ideología que tengan”, consideró.

Capitanich también resaltó los logros en materia de defensa de derechos humanos que se llevaron adelante en los últimos 12 años: “Argentina recuperó prestigio internacional a partir de la plena vigencia de una política de Estado en materia de derechos humanos, promoviendo juicio y castigo a los culpables en el marco de la Constitución”, enfatizó. De esta manera, aseguró que continuará trabajando junto al pueblo para “exigir memoria, verdad y justicia”.

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