El siniestro comenzó alrededor de las 20, en horario de dictado de clases, y el fuego se habría originado por un cortocircuito, aunque aún restan las pericias para determinar las causas.
Los alumnos y el personal del establecimiento lograron salir antes de que el fuego se expandiera, y no hubo víctimas fatales. Sólo un chico debió ser asistido por inhalación de monóxido de carbono y fue llevado al hospital de Sáenz Peña.
Las pérdidas materiales fueron totales.